Los cambers hacen que el sable se apoye sobre el mástil, forzando a que el sable esté siempre curvado. De esta manera, se consigue que la vela tenga permanentemente perfil aerodinámico (como un ala de avión).
Las velas sin cambers adquieren el perfil sólo cuando el viento las hincha, mientras que una vela con cambers se ve siempre aerodinámica. Esto hace, por ejemplo, que una vela sin cambers pierda más potencia cuando baja la racha de viento, mientras que la vela de cambers se mantiene más estable al tener siempre la "misma" forma.
Yo personalmente uso cambers sólo en las velas grandes, porque las prefiero para tener más potencia y estabilidad con viento flojo. Para viento fuerte, prefiero velas sin cambers porque son más maniobrables y divertidas.